miércoles, 9 de febrero de 2011

Caminando con los Incas hasta el Machu Picchu

Continuando con lo que empecé acá paso a hacer un resumen de los días 7, 8 9 y 10.

Las fotos están todas en el mismo lugar que las del otro post, o sea acá (empezando por esa en la que estamos los 3 sentados en el piso hasta las de la cerveza).


Para llegar a Machu Picchu decidimos ir caminando, haciendo el camino del Inca, aunque allá le dicen Inka Trail, es una "excursión" heavy porque hay que caminar 4 días por la montaña, durmiendo en carpa, pero no es imposible y se disfruta, al menos nosotros lo hicimos, muchísimo. El placer de llegar después de haber caminado 40 Km es, me imagino, mucho mayor que el que se siente si vas en micro. Después de este breve preámbulo paso al detalle de cada día.

Día 1 - Inicia la aventura y casi termina ahí

Arrancamos a las 5:30 de la mañana porque nos pasaban a buscar a las 6, ya teníamos los bolsos preparados del día anterior así que solo había que desayunar y esperar a que llegaran. Tal era nuestra ansiedad que nos sentamos en la calle a esperar aunque hacía frío.


Esto fue una buena idea porque después de media hora de esperar apareció un flaco con pinta de guía, le preguntamos si era, nos dijo que sí pero que no tenía que buscar a nadie en ese hostal... dudo un segundo y dijo "mejor reviso de nuevo" y cuando verificó la lista se dio cuenta que estaba mal el nombre del hostal, si no hubiéramos estado ahí capaz que se iban sin nosotros. De ahí nos mandó a la plaza de armas a esperar el micro.

Una vez en el micro nos acomodamos en el fondo y nos pusimos a boludear un rato esperando que salga, el boludeo fue muy largo porque faltaba alguien y no podían detectar quien era, pasaron lista como 10 veces de mil diez maneras distintas. Durante este boludeo conocimos a Paco, que estaba con su amiga Maru, que terminó siendo nuestro vecino de carpa.

Después de un rato salimos y fuimos directo hasta Ollantaytambo donde desayunamos unos panes con miel con cindor, solo que la cindor era marca gloria. Como estaba medio lluvioso Paco hizo una ofrenda a la Pacha Mamma con los restos de ese desayuno, vino muy bien porque nos tocó un clima espectacular.

De ahí un tramo más en micro hasta la entrada del camino donde almorzamos y conocimos a Pablo, Jaen y Ernesto quienes también estuvieron en nuestro grupo, eramos el ala nac&pop ;) y con más hambre de la excursión, de nuestro lado siempre faltaba comida =D

Luego del almuerzo hicimos el "check-in" es decir mostrar el pasaporte y la entrada para ingresar al camino y acá casi se termina, para mi, el viaje porque alguien metió la pata y me anotó como estudiante y me pedían la tarjeta ISIC para que lo demostrara, como no la tengo no me dejaban pasar, por suerte los guías, Pepe y Eloy, se re coparon, me ayudaron a subsanar el error y pude entrar. El problema fue que el resto ya se había ido así que nos perdimos las explicaciones de los sitios arqueológicos y tuvimos que apretar el paso para alcanzarlos.

Unas 3 horas más tarde estábamos, medio destruidos, buscando cual era nuestra carpa, tarea complicada porque las carpas las asignaron mientras esperábamos a que se resolviera mi problema burocrático, después de un ir y venir terminamos en el grupo que queríamos, con Paco, Jaen y el resto y nos fuimos a cenar. Después de la cena Eloy nos dijo que ese había sido el día más "fácil" de todos... y yo que soñaba con escaleras mecánicas...

Día 2 - La subida eterna y su bajada

Al día siguiente nos despertaron temprano con mate de coca, armamos los bolsos y nos fuimos a desayunar, teniendo en cuenta que era el día más pesado de todos y que el día anterior quedamos medio destruidos con Tute pagamos un porteador para que nos lleve una mochila y nos turnamos para llevar la otra. Con todo preparado comenzamos la subida, si no es la escalera más larga del mundo le pega en el palo, subís casi 2300 metros. En unas tres horas y media estaba en la primera parada del día, algo así como la mitad del camino.


Recuperarme de esa primera parte me llevó como media hora y de ahí a subir durante 2 horas más. Llegar hasta ahí fue toda una proeza, no daba más, en los últimos momentos solo tuve fuerzas para poner la marcha peronista en el celular, eso me dio las fuerzas necesarias para hacer el último tramo :p Mientras recuperaba el aliento llegó un flaco que, parado a tres escalones del final, me dice "haceme la musiquita de rocky o no llego" y al ritmo de tatantaaan tatantaaaan subió los últimos escalones y me sacó esta foto



Después de eso pensé que todo iba a ser más fácil, pero todavía quedaba la bajada hasta el campamento, que me llevó casi una hora por una escalera que parecía interminable, acá me torcí o algo, la cuestión es que si no fuera por el bastón que compramos me hubiera costado mucho llegar porque apenas si podía doblar la rodilla.


Día 3 - La promesa del agua caliente

Al iniciar el tercer día nos prometieron que al llegar al próximo campamento ibamos a tener duchas de agua caliente, hasta acá nadie se había bañado, con esa idea en mente salimos todos de muy buen humor. Este día saqué una sola foto y todavía no intercambiamos fotos con Charly y Tute. El dolor en la rodilla persistió y solo pensando en boludeces o hablando idem-eces lograba que no me molestara, así que mientras pude hablé de cualquier cosa con cualquiera que se cruzara.

Este día visitamos dos ruinas Runkuraqay y Sayamarka (si no me equivoco), la verdad es que lo que me dijeron de estos lugares no me acuerdo mucho, el segundo parecía un "hotel" había varias habitaciones o recintos y una vista excelente.

A partir de acá el camino se vuelve un verdadero camino inca, ya que la primera parte son construcciones más modernas, lo más interesante es pasar por unos túneles en la piedra.

En el camino los guías nos tentaban con la promesa de cerveza fría y las duchas. Cuando llegamos, junto a Pablo y Perla (luego de un interesante debate político-filosófico), nos encontramos con Paco y Jaen quienes nos avisaron que no había agua, resulta que hubo un derrumbe y se rompieron los caños así que seguimos sucios un día más.


Esa noche nos hicimos odiar un poco porque hubo una ceremonia para despedir a los porteadores y nosotros aprovechamos, con Jaen de portavoz, para reclamar por ellos mejores condiciones laborales, nos salió el sindicalista de adentro :)


Día 4 - Machu Picchu

Arrancamos temprano, muy temprano, después del desayuno como pintaba lluvioso hicimos una nueva ofrenda, esta vez con hojas de coca, que también resultó exitosay partimos rumbo a Inti Punku, la puerta del sol, que es el acceso posta-posta a Machu Picchu.

Esta subida es dura pero no se nota tanto, lo malo es que en un momento parece que estás llegando... y no, es solo un mirador, falta un tramo más; cuando llegás es increible porque te parás frente a la puerta y la ciudad no se ve, atravesás la puerta y "aparece" toda la ciudad, es tremendo el efecto.


Desde ahí hay que caminar un poco más hasta un mirador donde se saca la foto tradicional en la que se ve toda la ciudad después bajar un poco hasta la entrada al parque donde tenés que salir para volver a entrar y me rompieron las bolas de nuevo por el carnet ISIC y Eloy me rescató nuevamente.



La ciudad es impresionante, el ver esas construcciones tremendas hechas en la montaña, completamente aislado de todo, y esas paredes de piedras que encajan perfectamente. Te deja sin palabras y más después de 3 días y medio de caminar.


Un detalle muy loco es que hay una piedra en la ciudad que está tallada para que sea como una maqueta del valle, por lo que vimos en un museo los incas antes de construir maquetaban.

Momento emotivo, Ernesto llevó una foto de la chica que falleció el año pasado en el camino cuando fue el derrumbe y la dejó allá.



Dimos unas vueltas y emprendimos el descenso caminando, ni ahí pagábamos 7 dólares para bajar en micro, cuando retornamos a la civilización nos paró un flaco que nos ofreció cerveza helada, arreglamos el precio para comer los 7 y nos sentamos:

- ¿Van a tomar cerveza helada?
- SIIIIIII
- ¿Les traigo una pilsen de litro?
- Noooooo, trae siete.


En realidad pedimos 3 primero y otras 3 un rato después.


Y con eso concluyeron 4 largas y satisfactorias jornadas, hubo un viaje en tren y en micro para el retorno, pero nada del otro mundo.

En algunos días hago un post sobre los últimos días.

11 comentarios:

El Gaucho Santillán dijo...

Buenas fotos, che.

Y no te pasò nada, que es lo mejor.

Ultimamente, siempre hay accidentes.

Un abrazo.

Guty dijo...

Solo dos palabras: es-pectacular!
Y lo mejor de todo es que sale la remera de mi blog en un lugar al que yo dificilmente vaya a visitar alguna vez :D

Nick Risaro dijo...

Gracias Gaucho, ya sabía que las fotos estaban buenas jajaj

Guty, media pila, es un viaje muy bueno para hacer, por ahí dentro de unos años, cuando los enanos sean más grandes, pero vale la pena. Aparte vos estás más cerca ;)

Anónimo dijo...

Todo muy lindo, pero yo la verdad prefiero parar en un hotel con aire acondicionado y que me lleven en micro ejecutivo hasta la puerta :P

A Guty lo comprendo, con todos los años que tiene, caminar todo eso se le hace imposible. xD

Nick Risaro dijo...

Yo también prefiero un buen hotel, pero cada tanto hay que experimentar cosas raras (?).

Fepi dijo...

Que fuerte yo estuve el año pasado ahí y creo que me quede traumado con el camino del inca, no lo haría nunca después de todo lo que paso.

Me queda la duda en Aguas Calientes si ya reconstruyeron la calle que se había llevado el río, y que tan furioso estaba el río este año.

Que loco tengo que volver a machu picchu algún día porque me hicieron salir a las 3 horas de que entre jajaja!

Si tenes fotos de Aguas Calientes y del río a mano me gustaria verlas.

Nick Risaro dijo...

Bienvenido Fepi, el año pasado fue complicado estar por ahí.

La verdad no sé cual es la calle de Aguas Calientes que se llevó el río, pero no noté ninguna calle destruida así que supongo que la habrán arreglado. El río estaba tranqui, no como para meterse a nadar pero no estaba muy crecido.

Pablo le sacó varias fotos al río, le voy a preguntar si alguna salió bien y te las paso o te digo donde verlas.

Abrazo

El Mostro dijo...

¿Te dije ya que te envidio? Sanamente, eh!

Panqueca dijo...

¡Ahí sale la barba!¡La barba!
Decile a la barba que su apoyo telepático me hizo muy bien porque aprobé :)
La próxima mesa voy a necesitar más de eso, eh?
Beso para vos y saludos a la barba que trae suerte! (a lo Mirtha).

Layla dijo...

Nick,
Me encantó esta experiencia y el modo en que la cuenta, la ofrenda a la Pacha Mamma y casi casi que le pregunto por la foto de la chica y ahora descubro el por qué, ciertamente un momento emotivo.
By the Way,
Yo preparo el agua y las facturitas, mientras tanto usted no me cebaría un mate de coca? Curiosidad, que le dicen, vio?

By the Way II,
La musiquita de Rocky es inspiradora, no hay nada que no se pueda lograr con esa cancioncita de fondo...y si le suma el mate de ut supra ni le cuento!

Nick Risaro dijo...

Mostro, la envidia sana no daña (?)

Panqueca, seee la barba estaba como loca esos días.

Beso, la barba está completamente abocada en darte suerte, al parecer solo le puede dar suerte a una persona por vez.

Layla, la verdad es que ir a Perú y no hacerla linda con lo sacrílego.

Beso.

BTW I, Tengo unas hojas de coca, el "mate de" no es gran cosa, parecido a un té (ellos le dicen mate al té) común; ahora, mate con hojas de coca no probé, pero siempre hay una primera vez.

BTW II, Gran canción!